jueves, 1 de noviembre de 2012

LOS ANIMALES DEPREDADORES


 
 
 
Los animales depredadores son aquellos de régimen carnívoro y capaces de perseguir a sus presas para capturarlas, por lo que tienen que desarrollar una serie de adaptaciones que les permitan hacerlo
Moverse con agilidad es una necesidad para muchos animales. Sólo los grandes depredadores que no tienen enemigos naturales que les persigan, podrían prescindir de la velocidad. Sin embargo, con frecuencia deben correr tras sus presas y nadar o volar con gran rapidez para cazarlas.

En el mundo animal están los depredadores como: el león, lobo, coyote, perro salvaje, puma y tigre. Y se definen como presas a los ciervos, conejos, antílopes, cebras, venados, gacelas y las crías de cualquier animal. En estos casos, el depredador es un animal carnívoro, es decir, se alimenta de carne.

Es importante tener en cuenta que en la interrelación entre las especies, el ser un depredador o ser una presa constituye el principal factor del equilibrio ecológico y el hombre también tiene su participación, aunque la mayoría de las veces suele ayudar a alterar dicho equilibrio, ya que su erróneo comportamiento de depredador no mide el daño que causa al medio ambiente, especialmente cuando la depredación tiene que ver con la cacería deportiva.

Muchas especies depredadoras se encuentran en peligro de extinción justamente por esta actividad, la cual, esta prohibida en la mayoría de los países en el mundo, pero es algo muy difícil de controlar. Por otro lado es importante tener en cuenta que los animales depredadores cuentan con características físicas fundamentales para poder alimentarse, las cuales son la dentadura, las mandíbulas que se caracterizan por su fuerza, y lógicamente sus garras.

Además de estos casos de sobreexplotación, cacería, colección, comercio y control de depredadores, las causas directas de extinción se han intensificado debido al daño o destrucción del ecosistema en el que vive el animal. Estas causas son quizás los medios más graves de extinción de la vida silvestre.

Es importante conocer más de los animales depredadores, ya que de ellos depende el equilibrio ecológico existente, además de la aportación alimenticia que representan para el hombre.
 
En relación a la nutrición y el metabolismo, los animales se caracterizan por dos aspectos fundamentales:

1. La nutrición es heterótrofa y por ingestión. Los animales no son capaces de sintetizar su propio alimento a partir de la luz solar como hacen las plantas mediante la fotosíntesis. Por eso necesitan alimentarse de otros organismos o de sustancias orgánicas disponibles en el ambiente.

Nutrición o alimentación heterótrofa es la necesidad y capacidad de alimentarse de otros seres vivos o de sustancias orgánicas. Puede ocurrir por depredación o detritivoría.

En la depredación, el animal depredador se alimenta de otros organismos que encuentra vivos. Pueden presentarse los siguientes tipos de depredación:
•Herbivoría. Cuando el animal se alimenta de plantas o de sus partes, ya sea que mate a las plantas o no.
•Parasitismo. Cuando un animal se alimenta de otro al que está íntimamente asociado. Generalmente los parásitos son específicos de sus hospederos y no los matan, aunque existen excepciones a la regla.
•Carnivoría. Cuando un animal mata a otro para alimentarse de él. Es el tipo de alimentación típico de leones, tigres y otros grandes felinos, así como de muchos otros animales.
•Canibalismo. Es un tipo de carnivoría en el que el depredador y la presa son de la misma especie.

En la detritivoría, los animales se alimentan de materia orgánica en descomposición o detritos. En otras palabras, los detritívoros se alimentan de organismos muertos que ya se están descomponiendo. Algunos científicos consideran detritívoros solamente a animales microscópicos y otros seres pequeños, y consideran como necrófagos a los carroñeros de grandes proporciones como los buitres.

La diferenciación entre necrófagos y detritívoros es muy arbitraria, ya que ambos se alimentan de organismos muertos. Sin embargo, en el caso de la necrofagia, los organismos muertos pueden no estar en estados muy avanzados de descomposición. Además, muchos animales depredadores actúan como carroñeros cuando tienen la oportunidad.

En cualquier caso, los dos grandes tipos de alimentación de animales corresponden a la alimentación por depredación y la alimentación con organismos muertos.

2. El metabolismo es aerobio. A través de su metabolismo, los animales consumen oxígeno y desechan dióxido de carbono.

Resumen de las características de los animales

Los animales tienen las siguientes características que los hacen destacar de otros grupos de seres vivos:
•Son organismos pluricelulares
•Tienen células eucariotas
•Tienen células sin pared celular
•Tienen tejidos diferenciados
•Pueden desplazarse
•Tienen esqueleto externo o interno
• Tienen tubo digestivo interno
•Son individuos con límites precisos
•Tienen células sexuales especializadas, llamadas gametos
•Se reproducen sexualmente
•Atraviesan una fase de blástula durante su desarrollo
•Son heterótrofos y se alimentan por ingestión
•Tienen metabolismo aerobio










Voy a hablar sobre un animal ya extinguido, es el tigre de dientes de sable.
El tigre de dientes de sable de América fue una evolución muy grande para los mamíferos depredadores. Estos animales pesaban unos 400 kg aproximadamente y sus colmillos de arriba estaban mui desarrollados.
Aún no se sabe a ciencia cierta por que se extinguieron.
Los primeros mamíferos han evolucionado a partir de todos los reptiles..y este es uno de ellos, que murió.
Este animal vivió hace 20 mil años en Sudamerica, y se extinguió al final de la Edad de hielo.
Se sabe que no era un animal tan feroz como parecía y que era débil y no pudo sobrevivir bien a las alteraciones del clima de su hábitat.
El tigre diente de sable estaba especializado en cazar animales de mayor tamaño que el mismo, como el mamut. Y este animal atacaba en emboscada y clavaba sus grandes colmillos en la parte blanda de su cuerpo.





 

martes, 30 de octubre de 2012

DEPREDADORES MARINOS


 

 

LOS organismos que persiguen activamente y atrapan a sus presas, generalmente también móviles, para después engullirlas enteras o despedazarlas para comer sus fragmentos, reciben el nombre de depredadores, carnívoros o macrófagos.
En la comunidad marina existen animales especializados en filtrar continuamente el agua para devorar el plancton y que sirven, a su vez, de presa de los depredadores. Comer y ser comido en las verdes praderas del mar ha exigido una continua selección en favor de los mejor adaptados para defenderse y escapar de los depredadores, lo que a su vez exigió de éstos el perfeccionamiento de los métodos de detección y captura de las presas.
Los animales depredadores son aquellos de régimen carnívoro y capaces de perseguir a sus presas para capturarlas, por lo que tienen que desarrollar una serie de adaptaciones que les permitan hacerlo, como: la condición de buenos nadadores, la existencia de órganos visuales y olfativos bien estructurados, el desarrollo de denticiones apropiadas y de bocas especiales.
En un ser marino, el carácter de depredador va unido casi siempre a la posesión de tallas grandes, macroscópicas tanto en él como en la presa perseguida, aunque se presentan muchos casos, en los que el tamaño tanto del depredador como de la presa es pequeño, pudiendo considerarse dentro de este grupo a organismos del plancton que se alimentan de otros formadores del mismo plancton, utilizando la persecución activa de la presa.
También se toma en cuenta que pueden existir depredadores que lleven vida sésil, por lo que tienen que elaborar métodos especiales para la captura de sus presas como por ejemplo los organismos que viven fijos del grupo de los cnidaria o celenterados, poseen células urticantes, pequeños órganos muy complicados utilizados para la captura de las presas, los que presentan diversas modalidades según la forma como actúan: enlazantes, adhesivos y punzantes.
Las células enlazantes emiten filamentos que sujetan a la presa; las adhesivas y las punzantes disparan púas que se clavan en la presa inyectando en ella un tóxico paralizante. De este modo, pólipos diminutos pueden dominar organismos de su mismo tamaño.
Los depredadores sésiles de los cnidaria se reducen fundamentalmente a unas pocas especies que presentan la forma pólipo, cuyas células urticantes arponean a sus pequeñas presas causándoles la muerte por envenenamiento. Entre ellos se encuentran las "anémonas", cuya vistosa ornamentación y apariencia de organismos vegetales enmascara su auténtica dimensión de animales depredadores en postura de acecho.
Las anémonas se alimentan de pequeños peces, aunque no desdeñan presas mayores como sucedió en el acuario Niagara Falls en Nueva York, en donde un tiburón leopardo de 75 centímetros de longitud rozó el tentáculo de una anémona, que inmediatamente descargó sus tóxicas bacterias contra él. Otros tentáculos entraron en acción, y poco después el tiburón colgaba inmóvil de la anémona, que sin más empezó a engullirlo. A pesar de no tener más de 20 centímetros de diámetro, la anémona se tragó en seguida la cabeza del tiburón para digerirla con sus poderosos jugos, quedando el resto del pez fuera, para después ingerir más y más la presa dentro de su cuerpo en forma de saco dilatado al máximo.
Anémona, celenterado carnívoro.
Un tipo de anémona, la Cerea, posee hasta 200 mortíferos tentáculos en torno a la boca, que de noche proyecta sin cesar y como es incapaz de perseguir a sus presas, sólo puede atrapar incautos. En general las anémonas, a pesar de su apariencia inmóvil, excepción hecha de los tentáculos, pueden reptar sobre su disco basal carnoso en busca de los lugares más favorables para realizar las capturas de alimento.
La forma libre nadadora de éstos cnidaria es la medusa, y resulta la más peligrosa "la avispa de mar", característica de los mares cálidos, que posee el tóxico más potente de todos los celenterados, capaz de matar a un hombre.
Otros cnidaria presentan formas coloniales que flotan libremente como es el caso del género Physalia, llamada comúnmente "fragata portuguesa", que figura entre los seres más fascinantes y conocidos de la fauna marina. Aunque su aspecto es de medusa son en realidad colonias libres, integradas por cientos de individuos unidos entre sí y distribuidos en grupos con diferente función. Bajo el llamativo flotador de la colonia están los pólipos encargados de la caza y nutrición de la comunidad, conocidos como gastrozoides y que tienen, a manera de serpientes, unos mortíferos tentáculo provistos de millares de filamentos urticantes, cuyas toxinas son casi tan activas como las de la cobra; llegan a medir hasta 20 metros de longitud y cuelgan alargándose en dirección al fondo del mar en espera de presas adecuadas.
Basta que un pez haga contacto con un tentáculo para que éste dispare inmediatamente infinidad de dardos paralizantes, luego los tentáculos cazadores elevan la presa paralizada hasta el nivel de los pólipos comedores, que la digieren con sus fermentos. El alimento digerido se distribuye después entre todos los miembros de la colonia.
Otro grupo de invertebrados, los nemertinos son enteramente carnívoros; se alimentan primariamente de anélidos aunque comen también otros invertebrados pequeños, vivos o muertos, como moluscos y crustáceos. Capturan a su presa por la proboscis o trompa que lanzan fuera de su cuerpo, que a veces es dos veces más larga que él y que puede estar armada con dientes o ganchos, y la degluten entera, pasándola rápidamente a la boca y de ahí al intestino, donde la digieren.
Estudios experimentales en nemertinos han demostrado que la inanición produce gran disminución de tamaño y regresión estructural a un estado parecido al de larva.
Los crustáceos utilizan una gama muy amplia de dietas y mecanismos para la captura de su alimento. Muchos de ellos son carnívoros, modificándose la parte anterior del tronco o los apéndices torácicos para atrapar a sus presas, y las maxilas y mandíbulas funcionan para sostenerlas, morderlas y macerarlas.